Las agresiones a persona sanitario descienden un 9 por ciento en 2018 según los datos del Observatorio

Las agresiones a los trabajadores de la Gerencia Regional de Salud descendieron un 9 por ciento en 2018 respecto al año anterior, según los datos recogidos por la Sección de agresiones al personal de centros sanitarios del Observatorio de la Comunidad de Castilla y León, que hoy han sido presentados. Esto supone que se ha pasado de 639 trabajadores agredidos en 2017 a 579 en 2018, lo que implica una tasa de incidencia del 14,6 por cieto en Sacyl, seún los datos aportados hoy por la Consejería de Sanidad. 

Dichas agresiones se registraron en un total de 516 incidentes. En 46 de estos 516 incidentes resultó agredido más de un trabajador.

Por categorías profesionales, cabe destacar que de los trabajadores que sufrieron algún tipo de agresión 223 eran médicos, 184 profesionales de enfermería, 82 técnicos auxiliares de cuidados de enfermería, 28 celadores y 62 otro personal. Además, 330 agresiones se produjeron en hospitales, 242 en centros de Atención Primaria y 7 fueron a profesionales de la Gerencia de Emergencias. Hay que señalar también que 103 de los trabajadores fueron agredidos en áreas de Psiquiatría. Del total de las agresiones, 121 fueron a hombres y 458 a mujeres, lo que supone un 1,7  y un 1,8  por ciento, respectivamente, del total de la plantilla de Sacyl.

Asimismo, el 79 por ciento de estas agresiones fueron verbales, mientras que el 21 por ciento fueron de carácter físico: de estas últimas, el 56 por ciento tuvieron lugar en alguna de las áreas de Psiquiatría. Además, un 2 por ciento de los trabajadores agredidos registraron baja por incapacidad temporal –una cifra que desciende desde el 7 por ciento del año 2017.

En cuanto a las causas que desencadenaron la agresión fueron, en un 37 por ciento de los casos, la disconformidad con el profesional; en un 9 por ciento fue debido al tiempo de espera, mientras que en un 6 por ciento era por adicciones; en el 17 por ciento de los casos se debía a algún trastorno y en el 5 por ciento a una conducta problemática del agresor; en el 26 por ciento restante la agresión fue debida a otros motivos.